ASOJUDICIALES considera que es hora de la reflexión y los consensos al interior de la Rama Judicial, para alcanzar el acuerdo sobre lo fundamental.

Durante esta semana hemos escuchado a varios de los promotores y detractores del paro judicial hablando por los grandes medios de comunicación. Estos, ávidos de noticias, han dado aliento a la voracidad de sectores malintencionados, pero silenciosos, que esperan dar su zarpazo definitivo para tomarse el único patrimonio de los derechos ciudadanos: La independencia judicial. Porque sin jueces independientes no hay derechos.

Hemos escuchado a los presidentes de los dos Asonales: el Leal y el de Industria, a la presidenta
del sindicato del CTI, a la expresidenta de una de las muchas organizaciones civiles o sociales al
interior de la rama. Hemos sido invadidos por comunicados, incluido el nuestro, por volantes, debates radiales, columnas de opinión, editoriales, en fin. También los tonos se han elevado. Ahora quienes no participamos somos llamados esquiroles, y a los otros también se les macartiza. Así es por ahora el panorama del paro judicial.

Hay una realidad que debemos reconocer, que existen muchas organizaciones sindicales y civiles al interior de la Rama Judicial: ASONAL se dividió en dos: Leal y de Industria (SI). SINTRACOMUNEROS reúne a todos empleados y funcionarios de la rama judiciales. CTI y SEMJUD parece que son de gremio. Nosotros, ASOJUDICIALES, somos un sindicato de gremio que reúne única y exclusivamente a las juezas y jueces de Colombia. Además de las muchas asociaciones, colegios y corporaciones sociales y civiles, que existen al interior de la rama, para todos los intereses y gustos. Sin embargo, el que llamó y promovió el paro fue Asonal Leal o Legítimo. Y todos los demás estamos sometidos a la situación actual.

Nosotros, ASOJUDICIALES, desde un principio hemos expuesto nuestra posición de respeto al derecho constitucional a la protesta, pero al mismo tiempo llamamos la atención frente al contexto histórico y político que estamos viviendo para que supiéramos escoger de manera estratégica las luchas y los métodos para el logro de fines tan loables. Sin embargo, ahora nos encontramos frente a un gran problema, consistente en saber si valen los mejores o correctos argumentos, cuáles serían y quien tendría la razón definitiva.

Las juezas y los jueces estamos, dentro de la dinámica del paro, perdidos porque somos minoría: solo 4500, frente a la fiscalía que son más de 20000 y los empleados que son un número similar. Es la misma situación en la que nos puso el otro Asonal, el que se transformó en SI, en la mesa de negociación al momento de la nivelación salarial del año 2012.

Otra gran dificultad es el contenido de las reivindicaciones. Para nosotros los jueces no hay nada. El tema de la descongestión, con sus casi 9000 empleados, ha servido para clientelizar la rama pues no se respeta la carrera judicial ni sirve de incentivo o para promover a los empleados de carrera. Frente a este punto, reiteramos que debe terminarse esta política de manera definitiva y construir la planta definitiva, idónea y suficiente para la demanda actual y futura de justicia, y llamar a concurso público para todos esos cargos. En cuanto a la prima mensual del 30%, estamos tan mal representados que Asonal SI considera que los jueces todavía no tenemos derecho porque están pendientes de resolver las demandas de nulidad de los decretos anuales entre 2007 y 2013, desconociendo que existe un decaimiento material del acto administrativo y cosa juzgada material absoluta (Arts. 9.6, 91.2, 189 CPACA). Así mismo, admiten que el derecho fundamental a participar en los asuntos que nos afectan (Art. 2 CP y D. 160 de 2014) se agote con la socialización, incluso en un tema tan crucial para los jueces como es la calificación de servicios. Entonces son defensores de qué y de quién?

En cuanto al tema de la reforma constitucional, tenemos grandes diferencias con las demás organizaciones, esencialmente porque ASOJUDICIALES considera que las reivindicaciones de naturaleza salarial o prestacional, no son otra cosa que mecanismos o instrumentos que garantizan y posibilitan el derecho humano y fundamental a la independencia judicial, por esa razón la nivelación salarial, por ejemplo, tanto de empleados como de jueces, tiene que verse dentro del contexto de la política pública del estado para reforzar los derechos del justiciable y la materialización de la justicia distributiva, la igualdad de trato, más que un privilegio de los servidores judiciales. (C-244-2013) Y así las demás propuestas: la Fiscalía por fuera de la Rama Judicial, como órgano autónomo e independiente de rango constitucional, las competencias electorales de las altas cortes, la cooptación, la carrera judicial total y hasta las altas cortes, la democratización del órgano de gobierno de la Rama, en fin.

Aún así, el anterior panorama nos parece loable y positivo, esencialmente porque muestra una característica esencial de nuestra sociedad: el pluralismo. Este es uno de nuestros principios fundamentales. Para ASOJUDICIALES, el hecho que existan muchas organizaciones sindicales, sociales y cívicas al interior de la rama judicial debe ser visto como una oportunidad para construir consensos entrecruzados (Rawls), los cuales, como “instrumento procedimental de convivencia política democrática”, permitiría visibilizar nuestros intereses y diferencias como posibilitar acuerdos. Esta propuesta, si bien está diseñada para sociedades liberales bien ordenadas y que hayan alcanzado ciertos niveles de desarrollo institucional, seguramente podría ser ensayada en un subsistema como la Rama Judicial donde la reflexión y los buenos argumentos deberían imperar al momento de nuestra acción colectiva.

ASOJUDICIALES considera que es hora de la reflexión y los consensos al interior de la Rama Judicial, para alcanzar el acuerdo sobre lo fundamental, como diría un personaje de nuestra reciente historia y víctima de nuestras violencias. Solo queremos ser voceros de los derechos de las Juezas y los Jueces de Colombia, no pretendemos tomarnos por asalto la representación de los demás intereses legítimos dentro de la Rama Judicial, cada uno tiene su propio espacio y lugar, sin embargo, tampoco vamos a permitir que nuestros derechos sean enarbolados y defendidos por quienes no tienen nuestra representación y vocería. El llamado es, por ahora, para que las juezas y los jueces reflexionemos de manera autónoma en torno a nuestro papel en las circunstancias actuales, por esta razón intentaremos organizar un gran debate con el objeto de que podamos escucharnos y vernos en nuestras múltiples diferencias, sin el apremio de votación alguna, por el sólo ejercicio de pensar nuestra acción colectiva y, luego sí, adoptar las decisiones adecuadas y oportunas.

ADENDA. ASOJUDICIALES abre sus espacios a todos los candidatos a la COMISIÓN INTERINSTITUCIONAL, para llevar a cabo un debate y entrevistas, con el objeto de que la  Rama Judicial tenga un verdadero representante.